Ley 7: Procesos → KPIs → Valoración
La ley en una frase
Cada tarea se conecta a un proceso, cada proceso a un KPI, y cada KPI a un impulsor de valoración—ValuationOps reconfigura la ejecución para que el trabajo y el valor sean la misma conversación.
Por qué importa esta ley
La mayoría de las organizaciones viven en dos mundos separados:
- El Mundo de la Ejecución: Donde la gente hace el trabajo, completa tareas y corre procesos.
- El Mundo de la Valoración: Donde CFOs, inversores y juntas hablan de múltiplos, EBITDA y ARR.
Estos mundos casi no se hablan. El ingeniero que optimiza el pipeline de despliegue no sabe que su trabajo mejoró la “Conversión de Flujo de Caja Libre”. El vendedor que cierra un trato no nota que acaba de aumentar la eficiencia del CAC, una métrica clave de valoración.
La Ley 7 une estos mundos. Afirma que cada pieza de trabajo—por más táctica que sea—se conecta al valor de la compañía. Pero esa conexión es invisible si no construyes la línea de trazabilidad:
Tarea → Proceso → KPI → Impulsor de Valoración
Cuando esta trazabilidad es visible, ejecución y valoración se vuelven la misma conversación. Los empleados entienden cómo su trabajo hace a la empresa más valiosa. Los líderes saben qué procesos optimizar para subir múltiplos.

La interpretación de GFE
El modelo de cuatro capas
En GFE aplicamos una jerarquía estricta:
1. Tarea (La unidad atómica)
Una Tarea es la unidad mínima de trabajo. Se captura en un ValueLog: hora de inicio, hora de fin, actividad, prueba.
Ejemplo: “Desplegué la funcionalidad X a producción.”
2. Proceso (El flujo)
Un Proceso es una secuencia repetible de tareas que logra un resultado. Se mapea en un Flujo: personas, pasos, herramientas, decisiones, métricas, dependencias.
Ejemplo: “Proceso de despliegue de código” (Escribir → Revisar → Probar → Desplegar → Monitorear).
3. KPI (La métrica de desempeño)
Un KPI mide cuantitativamente qué tan bien rinde el proceso. Rastrea eficiencia, calidad o salida.
Ejemplo: “Frecuencia de despliegue” (cuántas veces por semana desplegamos).
4. Impulsor de Valoración (La señal de mercado)
Un Impulsor de Valoración es una métrica que inversores usan para valorar la empresa. Es lo que mueve tu múltiplo.
Ejemplo: “Velocidad de Producto” (proxy de velocidad de innovación que influye en múltiplos de crecimiento en tech).
La línea de trazabilidad en acción
Sigamos una sola tarea hasta la valoración:
- Tarea: Ingeniero despliega un hotfix en 30 minutos.
- Proceso: Esa tarea es parte del “Proceso de Respuesta a Incidentes”.
- KPI: El KPI es “Mean Time to Recovery (MTTR)”.
- Impulsor de Valoración: El MTTR impacta la “Confiabilidad del Sistema”, que afecta la “Retención de Clientes”, que impulsa la “Retención Neta de Ingresos (NRR)”, un múltiplo crítico en SaaS.
El insight: Ese hotfix de 30 minutos protegió la NRR—y por lo tanto la valoración.
Sin la trazabilidad, el ingeniero solo “arregló un bug”. Con ella, “defendió un múltiplo de 10x ARR”.
La física detrás de la ley
1. La ley de la legibilidad compuesta
La valoración depende de la legibilidad. Los inversores pagan más por negocios que entienden. Si los procesos no están documentados, los KPIs son difusos y el puente a valor es turbio, descuentan (“alto riesgo, baja visibilidad”). Con trazabilidad clara, pagan más (“bajo riesgo, alta confianza”).
2. El principio de la economía unitaria
Cada proceso tiene unit economics: costo/tiempo/calidad por salida. Optimizar un proceso mejora sus unit economics. Mejor unit economics fluye directo a drivers de margen (margen bruto, operativo), que determinan múltiplos EBITDA.
3. La economía de la atención
La atención es finita. Si la gente no sabe qué trabajo crea más valor, dispersará esfuerzo al azar. La Ley 7 crea un “gradiente de atención”: muestra qué procesos escalan hacia KPIs de alto apalancamiento para priorizar sin piedad.
Evidencia de investigación
Optimizar procesos eleva múltiplos: Las empresas que optimizan reportan ahorros de 15-25% de costos operativos y mejoras de productividad de 20-30%. Eso mejora márgenes, un factor directo en múltiplos.
Alineación de KPIs aumenta valor: KPIs alineados a estrategia mejoran decisiones y eficiencia. Crecimiento de ingresos, retención y LTV/CAC sólidos señalan negocios más estables y atractivos para inversores, que pagan múltiplos más altos.
Eficiencia operativa impulsa múltiplos de ingreso: Procesos documentados y sistemas eficientes reducen riesgo (más previsibilidad) y liberan capital (más crecimiento), justificando múltiplos superiores.
Cómo esta ley transforma la ejecución
Aplicar la Ley 7 cambia cómo el equipo entiende su trabajo.
Antes de la Ley 7:
- Ingeniero: “Arreglé el pipeline de CI/CD.”
- CEO: “¿Y eso cómo ayuda a levantar la Serie B?”
- Ingeniero: Encoge hombros.
Después de la Ley 7:
- Ingeniero: “Reduje el despliegue de 60 min a 10 min.”
- Dueño del Proceso: “Eso sube nuestro KPI de ‘Frecuencia de despliegue’ de 3x/semana a 10x/semana.”
- CFO: “Eso incrementa ‘Velocidad de Producto’, moviéndonos de múltiplo 6x ARR a 8x en SaaS growth.”
- CEO: “Perfecto. Muéstrame la trazabilidad en el deck.”
El trabajo no cambió. La visibilidad sí.
Caso práctico: El “proceso de $400K” que nadie veía
Contexto: Fintech mid-stage preparándose para adquisición. El comprador pregunta: “¿Cuál es su ciclo de Onboarding?”
El problema: Nadie sabía. Marketing, Ventas, Soporte, Producto tocaban onboarding, pero nadie era dueño end-to-end. No había KPI. Juntaron datos de 4 herramientas. Respuesta: “Unos 45 días, quizá.”
La violación: Rompieron la Ley 7. El proceso existía (la gente trabajaba), pero no estaba mapeado, ni medido, ni conectado a la valoración. Bandera roja para el comprador: “Si no miden onboarding, ¿qué más ignoran?”
La intervención: Hicimos Audit (Ley 6):
- Mapeo: Onboarding tenía 12 pasos en 4 equipos.
- KPI: “Time to First Value” (tiempo hasta que el cliente obtiene valor).
- Conexión a valoración: TTFV impacta “Customer Activation Rate”, que impulsa “Expansion Revenue”, métrica clave en fintech.
Descubrieron que el ciclo real era 72 días (no 45). Lo optimizaron a 28 días quitando 4 aprobaciones redundantes.
Resultado: El comprador subió la oferta $400K porque el onboarding optimizado mostró madurez operativa y captura de ingresos más rápida—menos riesgo, múltiplo más alto.

Cómo aplicar esta ley hoy
- Elige un proceso crítico: “Lead to Customer”, “Idea to Launch”, “Ticket to Resolution”.
- Mapéalo: Documenta los pasos reales con Mapeo de Flujo.
- Define el KPI: ¿Qué métrica mide el desempeño? (¿Tiempo de ciclo? ¿Tasa de conversión? ¿Costo por salida?)
- Conéctalo a valoración: Pregunta: “¿Qué driver de valoración influye este KPI?” (¿Crecimiento? ¿Margen? ¿Retención?)
- Hazlo visible: Lleva esta trazabilidad a dashboards, OKRs o deck del board.
Señales de que violas esta ley
- El “no sé”: Inversor pregunta “¿Margen bruto por línea?” y no respondes porque procesos no están ligados a costos.
- El KPI de vanidad: Mides “Tráfico web” que no conecta a ningún driver de valoración.
- El ROI invisible: Optimizaron un proceso pero liderazgo no ve impacto en EBITDA.
- El sprint desalineado: Ingeniería envía features que no mueven ningún KPI que le importe al CEO.
Cómo esta ley se conecta con la valoración
La Ley 7 es la base de ValuationOps.
ValuationOps es operar como si cada decisión fuera de valoración. Porque lo es.
Cuando optimizas un proceso, no solo “trabajas más rápido”: mejoras un KPI. Al mejorar un KPI, no solo “cumples una meta”: subes un driver de valoración. Al subir un driver, no solo “rindes mejor”: haces la empresa más valiosa.
Las empresas que dominan la Ley 7 pueden:
- Levantar capital más fácil (porque prueban sus métricas).
- Obtener múltiplos más altos (porque sus procesos reducen riesgo).
- Escalar de forma rentable (porque saben qué procesos crean más valor por dólar).
Narrativa de cierre
Imagina que construyes una máquina. Puedes armarla con piezas al azar, sin plano ni instrumentos. Quizá funcione. Pero al venderla, el comprador pregunta: “¿Qué eficiencia tiene? ¿Cada cuánto falla? ¿Qué output por hora?” Y encoges hombros.
O puedes armarla con:
- Un plano (Mapa de procesos).
- Medidores (KPIs).
- Una ficha técnica que muestre cómo su rendimiento se traduce en ROI (Drivers de valoración).
La segunda máquina se vende por 10x el precio de la primera. No porque funcione mejor—sino porque el comprador ve que funciona mejor.
Tu empresa es la máquina. La Ley 7 es el plano.
Procesos → KPIs → Valoración. Mapea la trazabilidad. Haz que trabajo y valor sean la misma conversación.

